Con esta obra la región de Coquimbo ha logrado rescatar parte de su historia, tradición y magia en la simplicidad de un pequeño libro. Recobra lugares y hechos olvidados de esta tierra rural en recuerdo de las 180 familias que fueron desplazadas en pos del progreso para la construcción del embalse Puclaro. Lucha por recuperar las tradiciones familiares perdidas, rememora el terremoto del 97 y critica su abandono hasta el día de hoy. Resurge la memoria a través de sus mismos muertos, fantasmas que se comunican con los vivos tratando de salvar sus recuerdos y así sus vidas.