Esta conmemoración fue propuesta, junto con la repatriación de los restos de Rosas, por el historiador José María Rosa en 1974 y aprobada por el Congreso de la Nación el mismo año. Más tarde, el 3 de noviembre de 2010, año del Bicentenario de Argentina, fue promovida a feriado nacional mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia emitido por la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner.